lunes, 29 de noviembre de 2010

Me dijeron una vez “No es el mejor ambiente. No son las mejores juntas. No te conviene, es más grande que vos. Podés buscar algo mejor”. Alguien se molestó en preguntarme qué necesito? No, porque obviamente nunca nadie es lo suficientemente bueno para estar conmigo. Porque básicamente para todos soy una especie de súper chica que merece mejores cosas de las que tiene. Y mientras escucho miles de advertencias me conformo con leerte un rato cada tanto.





[desde esa noche tu voz quedó sonando en mi cabeza]

lunes, 22 de noviembre de 2010

“No me podés hacer más daño del que me has hecho”. No lo dijiste enojada y eso fue lo que más me sorprendió. Aunque hubiera preferido que gritaras. Peor: el tono fue de tranquilidad, decepción y dolor. Lo único que pude hacer fue callar mientras miraba un punto fijo en la pared sosteniendo el teléfono y aguantando las ganas de llorar.

Obviamente la lista de las cosas que hice y hago mal, lo que no hice, lo que podría haber hecho, lo que empecé y nunca terminé, las oportunidades que desperdicié, las distintas formas en las que cierro puertas antes que se abran y demás no podía quedar afuera. Sí ya sé soy una maquinita de hacer cagadas.

Creo que con cada cosa que no me sale como lo planean se dan cuenta que soy más humana de lo que creen. Y ahí está el problema: verme allá arriba, pensar que soy infalible. Es que cada vez que estoy empezando a llegar suben los parámetros y las expectativas y es ahí cuando empiezo a tambalear, tropiezo, me caigo y me alejo de la meta. Son ustedes los que corren el cartel de ‘Llegada’ con la esperanza de que siempre voy a llegar más allá. Y soy yo la que se cae y levanta mil veces sin que lo noten.

Sé que todo lo hacen porque quieren lo mejor para mí y sienten la necesidad de cuidarme. Sé que lo hacen por el tremendo amor que me tienen. Les agradezco infinitamente por eso. Pero, creo, también tengo derecho a poder construir mi propia experiencia y para eso tengo que equivocarme, correr riesgos, chocarme paredes, tocar fondo... Porque de nada sirven las comparaciones. Sí está bien son mi familia pero cada uno vive, piensa, hace y deshace las cosas a su forma.

Esta soy yo. Grito, lloro, puteo en 5 idiomas, río, me equivoco, tengo días de [muy] mal humor, soy híper-activa, obsesiva con el orden y la limpieza, tengo migrañas, tengo tatuajes y piercings, la mayoría de las veces soy poco femenina, me gusta jugar al football, algunas veces pienso demasiado las cosas. ¿Sigo? No puedo evitar chocarme cosas, no me gusta ir al campo, hablo en cantidades excesivas, meto la pata, disfruto de mis momentos de soledad, pierdo cosas, le pongo nombre a casi todo, duermo con medias, choqué un auto y ahora tengo miedo de volver a manejar, soy autoexigente y a veces autodestructiva, trato de hacer lo mejor cada día, detesto levantarme temprano, tengo miedo, a veces soy demasiado impulsiva, estuve enamorada una sola vez, soy selectiva y distante. ¿Sigo?...

Tal vez no soy lo que esperaban. Les pido perdón si esta versión de mi persona no les gusta, pero es lo que hay. Espero que algún día puedan ver que si bien no sigo sus parámetros de perfección, no hago las cosas de la forma que les a ustedes les gustaría ó no sigo el mismo camino que ustedes siguieron sepan entender que hago lo que puedo.





[soy el ojo y soy el dueño de mi futuro en el infierno.

soy la otra mitad de la verdad.

soy miles de excusas sin rebobinar]

jueves, 4 de noviembre de 2010

Hace un tiempo me dijo: “Ya no siento esas mariposas”. Fue entonces cuando abrí mi panza y las dejé ir, porque no valía la pena tenerlas encerradas en mí. Porque era necesario que ellas decidieran por sí solas hacia dónde volar.

Un par de horas atrás dos de ellas encontraron un refugio. Sé lo mucho que significan para ella. Porque las dualidades la acompañaron siempre. Porque en ella van a encontrar su verdadera razón de ser. Porque entre ellas se van a hacer compañía. Porque le van a hacer compañía.




[porque en el fondo somos como ellas. estamos en constante metamorfosis]

martes, 2 de noviembre de 2010

Por fin las cosas están empezando a acomodarse. Es lindo volver a hablar de todo con vos. Compartir música. Reírnos. Contarnos sobre nuestras vidas. Calculo que estarás superando la incomodidad de aquel momento. Ya pasaron dos meses de... bueno, vos sabés. Tal vez sea demasiado pronto para decirlo (también puede que suene absurdo) pero creo que hemos crecido [y mucho].

Después de vos muchos me dicen que ven en mí una actitud diferente. Y es verdad, hasta yo me doy cuenta. Qué buena influencia sos! Por las buenas secuelas, gracias =)

Sí, como le dije ayer sigo muy bien y con una extraña sensación de tranquilidad.




[La mañana me trajo calma...]

domingo, 24 de octubre de 2010

No es que no lo hayamos hecho antes. Pero siempre supimos en dónde estábamos parados. Esta vez no. Esta vez no me sentí bien. Esta vez omitiste un detalle importante. Y sí, me molestó. Te lo dije el sábado a la mañana: “Mirame mientras me voy porque va a ser la última vez que me veas”. Y aunque parezca mentira cuando esas palabras salieron, me sentí mucho mejor.




[te dejo ir. y esta vez es para siempre]

viernes, 1 de octubre de 2010




[y si te mato por un tiempo es para no morirme yo]
Creo que llegó el momento de decir basta. Basta de correr atrás de quienes no se lo merecen. Basta de deshidratarnos llorando al pedo [sí, digo malas palabras. muchas] por aquellos que no valen la pena. Punto y aparte. Basta de gente que no le suma ni le resta nada a nuestras existencias.

Te hago una propuesta: mes nuevo, vuelta de página.