
- Qué bueno que está! Qué es?
- Un símbolo chino.
- Qué significa?
- Cambio.
Y con esa respuesta empiezo a ver como la cara de la otra persona se va transformando en un signo de pregunta…ahí es cuando me preguntan “¿Cambio?”, sí o acaso tenés problemas de sordera? Y se quedan mirando como esperando una explicación. Mmm…no, no te voy a decir por que. La ultima vez respondí “Por que sí” y me replicaron “No, debe haber algún motivo”. Y lo hay…pero no quiero expresarlo.
Muy pocas personas saben el por qué (una en realidad). Si nos ponemos en lingüistas podemos decir que el cambio es dejar una cosa o situación para tomar otra; es convertir; modificar; mutar. Yo prefiero quedarme con lo último: mutar.
Pero la pregunta sigue existiendo. Y la respuesta tal vez sea demasiado simple. Por que no podemos evitar los cambios. Por que por mas negativos que sean en un principio, siempre podemos ver la luz de lo positivo. No todos lo cambios son malos: nos ayudan a crecer. Y necesitamos crecer para poder madurar, evolucionar, seguir adelante.
Los otros días leí un recorte que tenia una reflexión (tal vez en algún momento lo publique) de la cual me llamó la atención una parte que decía: …”Temía al cambio, hasta que vi que aún la mariposa más bella ha de pasar por una violenta muda antes de poder volar”
Y es muy cierto. Le tememos al cambio por que nos vemos forzados a enfrentar algo desconocido y nos resistimos a que eso pase. Pero de todas formas va a pasar.
Para que nos demos cuenta de que ese cambio es algo positivo tenemos que abrir la mente y ser capaces de afrontar lo que viene. Tal vez no estamos preparados, pero lamentándonos y queriendo volver el tiempo atrás no solucionamos nada. Tenemos que adaptarnos. Es el único modo de poder sobrevivir a esta jungla de cemento.
El cambio pasó. No te avisó. La vida es así: está llena de imprevisiones.
Deal with it. Or hide, but if you do you’ll never grow up.
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